Columna Cuentas Claras … Septiembre/18/2024
Aduana, cuando se
quiere… se puede
· – . Inauguración de la ANAM obligó a unir esfuerzos de NL y hasta de Texas
· – . Más de una semana de aciaga violencia en Sinaloa, ¿es sensacionalismo?
· – . Solidarios esfuerzos para desaduanizar la carga tras daños en la Aduana
Por Javier Claudio
Aclarando. – Refleja el presidente Andrés Manuel López Obrador que tiene un problema pernicioso de digestión sobre los resultados que pesan al país ante la acrecentada violencia, si bien de mucho origen procede de los sexenios anteriores, en la actualidad el cuestionado apapacho y disimulo la han convertido en el “talón de Aquiles” del gobierno, peor aun que lo endilga a sus adversarios y lo cobija, según bajo una serie de sensacionalismos para minimizar los hechos de muerta, sangre y terror.
Claro que sí. – Un caso específico sería la violencia asfixiante en Sinaloa luego de más de una semana consecutiva de hechos delictivos que han derivado en una semiparalización de actividades y sin que autoridad alguna pueda frenarla, peor aún con los señalamientos de Francisco Leana Ojeda, comandante de la Tercera Región Militar, en Sinaloa, al citar que la calma dependería de que los grupos criminales dejen de confrontarse. Es realmente una insolencia y ofensa para el ciudadano esa apreciación.
Claridades. – Prendido con alfileres aparece y presume nuestro Gobierno un Peso fuerte, una economía sana y un desarrollo boyante, sin considerar que todo eso suele pulverizarse en cualquier momento ante los sostenidos embates de los grupos delictivos, que en cualquier momento pueden causar despojo. La incongruencia insiste en tratar de cimentar y contaminar, pues quién puede enarbolar bandera y celebrar patria si se pisotea la Constitución para crear reformas que pulverizan los derechos.
Clarín. – Tuvo qué ser el embate de un fenómeno natural que causara serios daños a la Aduana, pero más aun el compromiso de un evento oficial como es la inauguración de la ANAM el próximo sábado para propiciar que se removiera todo el aparataje de gobierno y se abocaran mil acciones para reparar la destrucción que se dejó en los carriles de importación del Puente III del Comercio Mundial. Bastó la voluntad de la ANAM para involucrar a Texas y Nuevo León en al apoyo a la Aduana de NLD.
Clarificando. – No asombraría a Nuevo Laredo que la inauguración de la ANAM sea sólo un montaje –debido a los problemas que se tienen para complementar el sistema operativo– y sólo el darle crédito al presidente Andrés Manuel López Obrador, tal y como sucedió con el Libramiento Mex II que lo entregó incompleto el entonces presidente Vicente Fox y le endilgó la conclusión a su sucesor Ernesto Zedillo, que jamás lo concretó y sigue convertido en un riesgo mortal para operadores de carga.
Claroscuro. – La característica de empecinamiento del mandatario, permite pensar que la ANAM será inaugurada en Nuevo Laredo, pero simbólicamente y apoyado esto en la terminación de sus instalaciones, no así el de la operatividad pues rechazan los empleados de Ciudad de México venir a Nuevo Laredo, así tampoco al no complementarse la cantidad de empleados contratados localmente para manejar el área administrativa. A qué empleado le atrae venir a enclaustrarse día y noche en la ANAM.
Claro que no. – No es estar en contra del gran proyecto de la ANAM, sin duda Nuevo Laredo será gran anfitrión, pero a mediano plazo pues el engranaje de aduanas comenzará apenas a rodar y tardará. Lo menos que podrá alcanzar la ANAM será el convencimiento de empleados operativos procedentes de México para echar a andar este órgano administrativo. Sí, quedarse aquí, pero por algunos meses en tanto capacitan personal y luego regresar en el plazo convenido y reencontrarse con sus familias.
Sabía usted que. – Entre la apurada actividad de reparación de los daños ocasionados a la estructura de los módulos de importación en el Puente III, trasciende entre el personal de obra que las causas del derrumbe del techado podrían haber sido ocasionadas por el olvido de colocación de “escuadras” de soporte entre la estructura y el techo para resistir los embates de vientos. Tras la reparación se realiza una evaluación técnica que determinarán las causas que ocasionaron la caída de la parte superior.